
La torre des Savinar -conocida popularmente como la torre del Pirata- y el mirador de Es Vedrà constituyen un recorrido breve pero majestuoso, vibrante y emotivo, lleno de imágenes que se han convertido en icónicas con el paso del tiempo.
Un espacio geográfico que se encuentra en el litoral sur de Ibiza, en el municipio de Sant Josep de sa Talaia. Es el final de una sierra que se extiende desde el interior de la isla hacia el mar. Un pequeño montículo sobre el que se asienta una torre de vigilancia del siglo XVIII, que en su vertiente oriental acoge una antigua cantera, conocida popularmente como Atlantis, de la que siglos atrás se extrajo el marés necesario para la construcción de las murallas de la ciudad de Ibiza en el siglo XVI. Todo ello un itinerario para vivir y sentir un paisaje de peladas formaciones rocosas y un mar más azul y transparente que el resto de mares que podamos imaginar.
Es Vedrà emergiendo entre la espesura del bosque
El punto de inicio de la caminata está en la carretera que conecta Sant Josep de sa Talaia con Cala d'Hort y que pasa por el pueblo de Es Cubells (EI-703). Un recorrido de 8,9 kilómetros que, en suave ascenso, nos llevará hasta un collado, a la altura de la Plana d'en Curt (a la derecha de la calzada), después del cual inicia un rápido descenso. A pocos metros del collado, a la izquierda, encontramos una pista de tierra que nos llevará hasta el aparcamiento donde debemos aparcar el vehículo.
Mirador de Es Vedrà
Una breve caminata de un cuarto de hora nos acerca a ras del acantilado. La sensación de vértigo es inmediata, pero rápidamente curada por una bella y opulenta panorámica, dominada ampliamente por los islotes legendarios de Es Vedrà y Es Vedranell. A nuestra izquierda, sobre el espolón rocoso que sale sobre el mar, la torre des Savinar; a la derecha, junto al mar, Cala d'Hort.
Mirador de Es Vedrà
El gigante de Es Vedrà
De la recopilación de fábulas recogidas por el escritor y folclorista ibicenco Joan Castelló Guasch (1911-1984) destaca la de 'El gigante de Es Vedrà'. En ella se cuenta la historia de un padre enfermo con dos hijos a su cargo. Un día, los jóvenes fueron a cosechar hinojo en el islote de Es Vedrà para curarlo; pero la tarea no fue nada fácil, ya que debían enfrentarse a un gigante cruel que se comía a toda persona que se acercaba a su guarida. Vivía escondido en una cueva, la más inaccesible del islote. La viveza de los dos hermanos consiguió que aquel gigante quedara indispuesto gracias a una indigestión de pulpos rellenos de erizos de mar y así poder recoger el hinojo sin que se los comiera y salvar a su padre.
Torre des Savinar
Concebida dentro del plan borbónico de defensa litoral e insular de los territorios hispánicos, fue proyectada, junto a otras torres costeras, hacia mediados del siglo XVIII (1756) por el ingeniero Joan Ballester de Zafra, entonces ingeniero director del Reino de Mallorca; pero su construcción no terminó hasta 1763, cuando el ingeniero José García Martínez informó de la finalización de las obras. Esta torre y su entorno han sido fuente de inspiración de leyendas (El gigante de Es Vedrà), novelas ‘Los muertos mandan’ (1909) de Vicent Blasco Ibáñez -de donde surge su denominación más popular- e, incluso, la portada de un disco, ‘Voyager’ (1996) de Mike Oldfield. La Torre des Savinar fue declarada bien de interés cultural en 1949.
La Torre des Savinar, del siglo XVIII, y los islotes de Es Vedrà y Es Vedranell
Los muertos mandan
Esta torre fue escenario de parte de la novela de Vicente Blasco Ibáñez, ‘Los muertos mandan’ (1908), con el novelesco nombre de torre del Pirata, denominación que ha tenido mucho éxito en las guías turísticas y postales. La obra cuenta la historia de un noble en declive, Jaume Febrer, que para salir al paso de la ruina económica y moral deberá refugiarse en una antigua torre costera de Ibiza, desde la que se enfrentará a varios dramas, en un entorno agreste y lleno de peligros.
Sa Pedrera
Antigua cantera de marés ubicada a orillas del mar, a los pies de la torre des Savinar. Se la conoce como Sa Pedrera, aunque en los últimos años del siglo XX recibió el extraño y algo enigmático nombre de Atlantis. Siglos atrás, de aquí se extraía la piedra que luego se transportaba a Sant Antoni de Portmany o a la ciudad de Ibiza, Vila. Desde la misma pista de tierra que conecta la carretera con el mirador des Vedrà, nace un camino que baja a la zona descrita.
Sa Pedrera, conocida popularmente como Atlantis
La fortificación de la ciudad de Ibiza
La renovación y fortificación de la ciudad de Ibiza, en el siglo XVI, formaba parte del plan de modernización de las defensas costeras del Mediterráneo, impulsado por los reyes Carlos I y Felipe II, para mantener y defender los territorios de la Corona en una época de continuos conflictos bélicos con Francia y el imperio otomano. El proyecto lo diseñó el ingeniero Giovani Battista Calvi y las obras empezaron a principios de 1555.
Sa Pedrera vista des de la cima del Cap Des Jueu