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Disfruta de las playas de Baleares sin dañar la Posidonia
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Disfruta de las playas de Baleares sin dañar la Posidonia

Por Cristina Abel. Fotos: Agencias y Pau Coll


BuceoPosidonia

Baleares concentra el arrecife de posidonia de mayor envergadura de España y del Mediterráneo. Conservarlo es una tarea de todos, promoviendo una mayor concienciación y comportamientos responsables.

 

En 1999, la UNESCO declaró la posidonia oceánica Patrimonio de la Humanidad, reconoció su importancia para la biodiversidad del Mediterráneo y su papel crucial en la protección de la costa. Baleària también está comprometida en su conservación, y a través de la Fundación Baleària colabora en el proyecto ecoturístico 'Viu la Posidonia', que desde 2021 trata de involucrar a la sociedad en la protección, cuidado y conservación de la fauna y flora marina. Estos son algunos consejos fundamentales para disfrutar de las costas sin poner en riesgo el futuro del Mediterráneo.

 

1:

Respeta la posidonia y la sostenibilidad submarina

La posidonia se encuentra en el litoral y no suele desarrollarse a profundidades mayores de 30 metros, ya que para la fotosíntesis es necesario la luz solar. Es importante no tocarla ni arrancarla, tampoco retirarla de las costas. Se trata de un recurso natural protegido y su degradación puede tener consecuencias graves en el ecosistema marino. «Es una especie clave para la sostenibilidad del Mediterráneo. Su desaparición tendría graves consecuencias ecológicas y económicas, ya que afectaría a la pesca, al turismo y a la calidad de vida de las comunidades costeras», subraya Ángel Pérez-Ruzafa, catedrático de Ecología de la Universidad de Murcia.

 

2:

Fomenta la cultura de la sostenibilidad entre los tuyos

La protección de la posidonia es una tarea de todos. Por ese motivo, fomenta la cultura de la sostenibilidad y anima a tus amigos y familiares a sumarse a la tarea de proteger este valioso recurso natural. En definitiva, disfrutar del mar y la playa no está reñido con la sostenibilidad.

 

 

3:

Evita el uso de cremas solares contaminantes

Es importante elegir productos que sean respetuosos con el medio ambiente. Según el Boletín de Polución Marina, los químicos de los protectores solares pueden estar dañando los ecosistemas de los pastos marinos, ya que se han encontrado filtros UV, presentes en los protectores solares, como el metilparabeno o la oxibenzona. «Dado que el mar Mediterráneo es poco profundo y muy cerrado, las concentraciones de productos químicos que absorben los rayos UV pueden alcanzar niveles muy altos», comenta Silvia Díaz, coautora del estudio.

 

4:

No ancles tu barco

Las anclas de los barcos pueden dañarla y provocar su muerte, ya que es una planta muy frágil. Los expertos recomiendan el uso de boyas habilitadas para este fin o elegir zonas de fondeo alejadas de los prados.

 

5:

No tires basura al mar

Las praderas de posidonia son una barrera natural contra la erosión de las playas y un escudo en la orilla que ayuda a proteger la costa. La basura que genera el ser humano puede acabar con estos prados y dañarlos gravemente. Es importante que lleves contigo siempre bolsas donde depositar los residuos y ubicarlos en los lugares habilitados para ello.

 

 

6:

Respeta las señalizaciones y deja todo en su lugar

Si en una playa o cala hay señalizaciones que indican la presencia de prados de posidonia, no te acerques demasiado y respeta las indicaciones. Es importante reforzar la información a los usuarios sobre la importancia de preservar las praderas de esta planta única. Por otra parte, es muy habitual que los turistas recojan conchas y animales marinos para llevarse a casa como recuerdo de sus vacaciones. Esta práctica puede dañar el ecosistema marino.

 

7:

Evita el uso de embarcaciones a motor

Un estudio publicado en la revista científica Marine Environmental Research analizó el impacto de las embarcaciones de recreo en la posidonia en la costa sur de España. Los resultados indicaron que esta actividad causa una disminución significativa en la densidad de la planta. Es importante tomar medidas para limitar este impacto y proteger los ecosistemas marinos, además de la utilización de embarcaciones no motorizadas o navegar por zonas alejadas de los prados.

 

8:

No pesques sobre su ecosistema

Según la revista académica Estuarine, Coastal and Shelf Science, que evaluó en un amplio estudio el impacto de la pesca de arrastre en la posidonia en la costa de Mallorca, esta práctica causa una disminución significativa en la densidad y la biomasa, así como una reducción en la diversidad de especies asociadas a ella.

 

9:

Practica el buceo responsable

La frecuencia y la intensidad del buceo recreativo pueden tener un impacto significativo en la salud de las praderas y su supervivencia. Por estos motivos, se deben crear zonas de protección, así como fomentar la educación de los buceadores sobre las prácticas sostenibles de buceo e implementar reglas y normas que limiten la frecuencia y la intensidad de esta práctica en zonas especialmente sensibles.

 


10:

Participa en las actividades de educación ambiental

Cada vez más empresas, ayuntamientos y organizaciones no gubernamentales ofrecen actividades de educación ambiental para dar a conocer la importancia de la posidonia y otras especies marinas. Sé proactivo y participa en este tipo de iniciativas medioambientales para poder compartir toda esa información con tu entorno, sobre todo con las generaciones más jóvenes.

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Pedro Bailón: «En máquinas se forman familias muy fuertes»
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  A Pedro Bailón (Premià de Mar, 1992) el mar siempre le ha llamado la atención y, aunque hubo un tiempo en que dudó entre el trabajo en un buque y el de tierra, la atmósfera de la vida a bordo le cautivó. Actualmente es jefe de máquinas del Ciudad de Mahón, en el que forma parte de un equipo con un engranaje muy sólido.     P. ¿Cómo es el día a día en la sala de máquinas de un buque? R. Cada día es una nueva aventura y un nuevo reto. Siempre tienes experiencias nuevas que te hacen aprender y ser mejor día tras día. La máquina de un barco es un lugar peculiar,  donde nacen y se forman familias muy fuertes. En cada momento tienes a unos cuantos valientes luchando contra los retos que surgen. Más que hablar del día a día, realmente es un constante trabajo en equipo. Cada jornada se rige por unos trabajos de mantenimiento organizados que hacen que el corazón del barco funcione como un reloj suizo. A partir de aquí se reparte el trabajo a cada uno de los integrantes, porque todo suma y un poco de todos es mucho para el área de Máquinas y para el barco. Impera el buen estar, el buen hacer y el compañerismo; se intenta ser lo más profesional posible y estar a la altura de cada situación. En la vida a bordo también es muy importante saber gestionarse el tiempo... especialmente para la gente de Máquinas es muy importante el descanso, porque nunca sabes qué puede pasar.   P. ¿Cuáles son las cualidades de un jefe de máquinas? R. Sobre todo es imprescindible saber mantener los nervios. Si el jefe de máquinas se pone nervioso... lo contagia a todo el equipo. También es fundamental hacer equipo.   P. ¿Qué te motivó a trabajar en el mar y especializarte en Máquinas? R. Tengo una relación estrecha con el mar desde bien pequeño, cuando veraneaba con mis padres en la costa de Tarragona. La motivación de dedicarme al mar surge sobre todo de su inmensidad y de sus ‘cambios de humor’, que siempre me han fascinado. En cuanto a decantarme por  Máquinas, viene de mi inquietud... siempre me ha gustado investigar y conocer cómo funciona cualquier detalle; y qué mejor sitio que una sala de máquinas para saber el cómo, el cuándo y el porqué de todo. Soy un apasionado de la reparación en general y, además, me encanta la  mecánica.     P. ¿Alguna anécdota curiosa o momento que recordar? R. A bordo cada día es una nueva aventura. Pero si tengo que quedarme con algún momento seguro que sería mi primera vez dentro de una sala de máquinas; nunca lo olvidaré. Los olores de combustibles, que acabamos normalizando, y, por supuesto, el ruido. Evidentemente de anécdotas tengo mil y una, pero como digo, Máquinas es una familia y me quedo con todos los momentos difíciles donde entre todos se ha sacado todo adelante.   P. ¿Qué haces cuando estás desembarcado? R. Al final cuando estás en casa intentas hacer todo lo que no te ha dado tiempo durante tu embarque. Me describiría como un todoterreno; tengo varias facetas, pero la que más me define es mi afición por la pesca, a la cual dedico mucho de mi tiempo libre. También me gusta leer y practico mucho deporte. Me encanta pasar tiempo con los míos e intentar dedicarles mis mejores momentos. Además, disfruto mucho yendo a ver a mi equipo preferido al campo, el RCD Espanyol, y sufriendo con éste. También me estoy aficionando a la cocina, pero aún me falta practicar. Y por supuesto salir en moto.     Con el mar cerca Su pasión por el mar y la mecánica hizo que estudiase en la Facultad de Náutica de Barcelona. Ha trabajado en diferentes sitios, tanto a pie de muelle como a bordo, pasando por remolcadores, empresas de mantenimiento y buques de crucero. Pedro es tanto ‘de mar’, que incluso su  tiempo libre lo dedica a otra de sus pasiones, la pesca.      


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La construcción de un foso de arena alargado paralelo a la costa entre la zona dunar y la orilla del mar, junto con los fuertes vientos de levante desplazaron la arena y provocaron un aumento de la franja dunar que aumenta, imparable, año tras año.    Actualmente, en los días de fuerte viento de levante, la arena invade totalmente la carretera A-2325, en la que habitualmente los turistas curiosos se hacen selfies con las señales de tráfico medio enterradas. 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