Mallorca

Ferry a Mallorca: ¡planea el viaje que tú quieras!

Que la isla mayor de las Baleares tiene mucho más que playa se confirma nada más llegar en ferry a Mallorca. La postal que puedes presenciar del puerto con la Catedral y el Palacio Real de La Almudaina se grabará en tu mente para siempre. Por lo tanto, nada más llegar, ¡acércate a conocer el patrimonio cultural más importante de Palma!

Son tantos los rincones por descubrir a lo largo y ancho de la isla que te recomendamos que viajes en ferry a Mallorca con tu vehículo a bordo. Al desplazarte con él, aprovecha para llenarlo del equipaje que necesites para sacarle el mayor partido posible a la isla. Por ejemplo, si eres un amante del ciclismo, ¡sube tus bicicletas al ferry a Mallorca! El noroeste de la isla cuenta con puertos de montaña como Sa Calobra o Puig Major que, además de presentar un desafío para los cicloturistas, ofrecen unas vistas de otro mundo.

Pero tu próxima visita en ferry a Mallorca también puede ser una oportunidad para descubrir la Serra de Tramuntana junto a toda tu familia. ¿Qué tal una ruta de senderismo para quedarse fascinado con este Patrimonio Mundial de la Unesco? Además, puedes acompañarla con visitas a pequeñas aldeas como Sóller, Valldemossa o Pollensa.

Por supuesto, tu escapada en ferry a Mallorca no puede finalizar sin pegarte un chapuzón en cualquiera de sus espectaculares calas. En la costa noroeste puedes hacerlo en la única Sa Calobra o en la tranquila Cala Tuent, mientras que al sur se encuentra la hermosa Cala Llombards.

Recuerda que con Baleària puedes desplazarte en ferry a Mallorca desde las ciudades de Valencia, Barcelona, Dénia, Ibiza o Menorca con los horarios que mejor te convengan. ¡Súbete al ferry y descubre Mallorca como nunca lo has hecho!